Los siguientes cinco puntos pueden ser significativos para comprender cómo se construye socialmente el género. (1) El primer punto es que existe una variedad de teorías, a veces contradictorias, que intentan explicar el género y los comportamientos de género, que plantean preguntas que la investigación futura puede no responder de manera absoluta. El segundo punto es que los comportamientos de género se han visto como respuestas/reacciones al poder y la autoridad en cosas tales como la colonización británica, el capitalismo, el patriarcado, las familias, las relaciones entre adultos y niños, el lugar de trabajo, los grupos y las instituciones como las escuelas. El punto número tres es que se cree que los mensajes de los medios, los textos, la historia, la cultura popular y las estructuras sociales tienen una poderosa influencia en la construcción del género. El punto número cuatro es que se ha visto que la construcción de género tiene lugar a través del ‘discurso’. El punto final, número cinco, es que los lugares públicos como las escuelas son sitios importantes de construcción/producción, reproducción de género. Todos estos puntos están interrelacionados y no pueden ser discutidos en profundidad sin superponerse en otro.

TEORIAS

El concepto de Género es ‘uno de los conceptos más turbios’ según Constantinopla (Connell, 1993, 174). Es ‘problemático’ (Thorne, 1993, 58), porque significa diferentes cosas para diferentes personas. Algunos usan la palabra indistintamente con la palabra sexo. P.ej. Se escribe ‘género’ en algunos documentos para averiguar la naturaleza biológica de la persona que completa el formulario. Para algunos que lo ven desde una perspectiva determinada biológicamente, es un resultado natural de cosas como la genética, las hormonas y la organización del cerebro. (Weiten, 1998, 464). Para algunos que lo ven desde una perspectiva ambientalmente determinada, la palabra se usa para referirse a las formas variables y negociables, construidas cultural y socialmente, de ser ‘masculino’ o ‘femenino’ en una circunstancia histórica o cultural particular (Measor y Sykes, 1992). , 5). ¡El concepto es tan problemático como el debate de ‘naturaleza versus crianza’! También es problemático porque el concepto de género ha introducido una variedad de vocabulario influyente y despectivo que se refuerza a través de creencias y usos populares. P.ej. ‘Tomboy’, ‘Wimp’, ‘masculino’ y ‘femenino’.

Los conceptos plantean interrogantes como: ¿Por qué utilizar las palabras ‘masculino’ y ‘femenino’ al referirse a comportamientos y características, infiriendo así que algunos son normales para un sexo en particular? ¿Por qué no simplemente llamarlos comportamientos y características? Seguramente las cualidades de liderazgo no son comportamientos ‘masculinos’ o masculinos. Seguramente las cualidades de cuidado no son un comportamiento ‘femenino’ o femenino.
¿Existen comportamientos que sólo se construyen socialmente? ¿Todo excepto las diferencias físicas entre los sexos son construidas socialmente?

¿Cuánto control tiene una persona para convertirse y ser quien es?
¿El comportamiento sin género significaría eliminar la palabra ‘género’, ‘masculinidad’ y ‘feminidad’? ¿Queremos llegar a ser tan indiscriminados que aceptemos tantas formas de ser como sean posibles o deseadas?

En el campo de la investigación de género también hay ‘problemas’. Aunque se ha investigado mucho sobre las diferencias de género, a veces se han postulado conclusiones en forma de estereotipos grupales sobre “personas promedio” que no muestran el rango de diferencias individuales (Weiten, 1989, 462-3) y suponen que niñas y mujeres / hombres y niños son un grupo homogéneo (Sturrock, 1995, 127). Las diferencias entre y dentro de los sexos se han magnificado porque las similitudes se han descuidado en los estudios. Según Howard y Hollander (1987, 12), se ha encontrado que las diferencias entre los sexos son mínimas.

Hay una serie de marcos que se han utilizado para clasificar las diferentes teorías de género. Por ejemplo, Connell (1993, 41-65) usa ‘extrínseco’ e ‘intrínseco’ para clasificar teorías. Los marcos hacen parecer que la teoría académica dominante se ha movido en etapas desde (1) favorecer una orientación imperativa biológica a (2) una socialmente contraída, a (3) una socialmente construida y ahora a (4) una más holística . Usaré el marco que Howard y Hollander (1997) han usado como base para explicar y discutir algunas de las teorías de género. Es decir. Teoría Esencialista, Teoría de la Socialización, Teoría de la Construcción Social y Teoría Postestructural.
Las teorías esencialistas sugieren que cosas ‘naturales’ como el sexo, la genética, las hormonas y la organización del cerebro determinan el género (Weiten, 1989, 464), (Howard y Holland, 1987, 153). Estas teorías no dan cuenta de la interacción de las influencias culturales y estructurales y de la agencia humana. Tienden a equiparar género con sexo.